ABREVADERO DE LA CAVA

El sistema de aguas de La Cava recibe el agua de un pozo subterráneo cercano que se canaliza para darle diversos usos. Primero encontramos un pequeño abrevadero a nivel del suelo bajo una pared de piedra enlucida con un pequeño caño, destinado tanto a llenar cántaros para llevar agua al hogar como para caballería; seguidamente encontramos un pequeño lavadero al que acudían las mujeres a hacer la colada y un poco más abajo, por el camino del Pozanco, se encuentra un segundo abrevadero y finalmente el popularmente conocido como “balsón”, destinado a ganado y otros usos agrícolas. Del mismo modo que la Plaza de San Agustín, este conjunto de infraestructuras civiles se convertían en un punto de reunión y socialización importante para el municipio y, a día de hoy, son un ejemplo perfecto del aprovechamiento de los recursos hídricos en el pasado.