Castell Piló

Los restos de poblamiento en el término municipal se remontan a la Edad de Bronce con numerosos yacimientos de la época íbera. En los siglos que duró la dominación musulmana existen pruebas documentales que acreditan la existencia de una alquería.
Queda constancia que Jaime I dio la población y su castillo al abad de Fuentclara en 1238, la reconquista se produjo con anterioridad en 1238 y con posterioridad ostentaría la titularidad del señorío el noble Raimundo de Torios, quién lo vendería, en 1379, al matrimonio formado por Jofré de Blanes y Caterina de Bonastre que lo incluirían en sus territorios que formaban la baronía de Segart.
El año 1482 sería comprada por Juan Castellsens de Villarrasa y posteriormente pasaría nuevamente en la corona. La expulsión de los moriscos, en 1609, ocasionó que la población quedara casi deshabitada, razón esta por la que tres años más tarde se iniciaría su repoblación con gentes de origen catalán.
El castillo se encuentra en las proximidades de la población de Albalat, en la cima de un cerro. Por debajo del mismo discurre el túnel de una antigua vía de tren, junto con la autovía de Sagunto a Segorbe.
El castillo se ubica sobre una montaña rocosa, del mismo nombre, a cierta distancia de la población. Se encuentra en ruinas, no obstante todavía se aprecian suficientes elementos derribados de sus murallas, restos de construcciones auxiliares y parte del que tuvieron que ser algunas de sus torres defensivas. Se han encontrado restos de cerámica ibérica, romana y medieval. (C.Pérez-Olagüe)