Colchón

Fer i desfer, la faena del matalafer (hacer y deshacer, la faena del colchonero). Los antiguos colchones se rellenaban de lana de oveja o de hojas de las espigas de maíz. Este tipo de relleno obligaba a deshacerlos con periodicidad para esponjar el relleno compactado por el uso y higienizarlo. El colchonero descosía los colchones, vareaban la lana, rellenaban de nuevo la funda y volvían a coser. Este era uno de tantos oficios orientados a las reparaciones, muchos de ellos itinerantes, que conformaban una economía circular basada en el aprovechamiento.