Escoba
Escoba realizada al modo tradicional con palma, palmeta, cordel de esparto picado y caña. Granerer o escobero fue uno de los oficios artesanales que abundaron en Torrent entre mediados del siglo XIX y la primera mitad del XX, hasta el punto de crearse en 1851 una sociedad con estatutos para el socorro mutuo, que estuvo vigente hasta los años 60. El oficio se transmitía de padres a hijos, y en ocasiones, cuando no había hijos varones, de suegro a yerno. El trabajo de granerer o escobero comprendía todo el proceso, desde la recolección de la palma, la fabricación del hilo de esparto y la confección de la escoba, hasta la venta y la reparación ambulante. Se anunciaban gritando “el granerer” o tocando una trompeta. Había diferentes tipos de escobas según la clase de trabajo para el que se fuera a utilizar: escoba de barrer, escoba de techo con el mango largo para quitar las telarañas, escobilla o pincel para encalar las paredes de la casa, escobillas “de punyet”, empleadas para limpiar el horno, o escoba de la dote, a la que se enrollaban trozos de lana de color. Todas estas tareas eran realizadas por las mujeres en el ámbito doméstico.